CADENA JOVEN
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“Lo que ocurrió aquí fue una especie de nueva declaración de independencia de todos los países latinoamericanos”, aseguró el Gobernador bonaerense
El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, encabezó este miércoles en Mar del Plata el acto conmemorativo por los 20 años de la IV Cumbre de las Américas y del histórico “No al ALCA”, donde llamó a “seguir construyendo la unidad latinoamericana, la lucha por la democracia y la resistencia a la ultraderecha”.
El mandatario provincial participó del panel de cierre del encuentro de organizaciones sociales, sindicales y políticas realizado en el Teatro Auditorium, en recuerdo de aquellas jornadas del 4 y 5 de noviembre de 2005, cuando la ciudad fue escenario de la oposición al Acuerdo de Libre Comercio impulsado por Estados Unidos. En aquel entonces, la Cumbre de los Pueblos y la posición conjunta de varios gobiernos latinoamericanos frenaron el proyecto económico norteamericano encabezado por George W. Bush.
“Lo que ocurrió aquí fue una especie de nueva declaración de independencia de todos los países latinoamericanos”, aseguró Kicillof ante representantes de la CTA, CGT, UTEP, PIT-CNT y el Foro de San Pablo, entre otros espacios regionales. “Teníamos la responsabilidad de darle la envergadura y la importancia que tiene para nuestra historia este hecho, que marcó un punto de inflexión en el camino de la integración regional”, agregó.
El gobernador destacó que la conmemoración “no debía ser simplemente un acto”, sino “una oportunidad de reflexión y trabajo colectivo” para pensar los desafíos actuales de América Latina. En ese sentido, instó a los gobiernos progresistas de la región a “contraponerse a la nueva ultraderecha que ronda por todo el planeta” y a “mantener viva la agenda de soberanía y justicia social” que surgió de aquellas jornadas.
“Quien derrotó al ALCA fue el pueblo latinoamericano”, subrayó Kicillof, al recordar que la cumbre de 2005 “fue el resultado de una serie de movimientos y luchas que se venían dando desde hacía mucho tiempo en todo el continente”.
Durante su discurso, el mandatario provincial también repasó el contexto histórico en el que se gestó el proyecto del ALCA, al que calificó como “la institucionalización de la dominación norteamericana bajo la forma del libre comercio”. “Se hablaba de nivelar la cancha —recordó—, pero en realidad se trataba de inclinarla a favor de las grandes transnacionales, dejando a los pueblos en total indefensión”.
Finalmente, Kicillof señaló que el espíritu de Mar del Plata 2005 “debe servir como mojón de camino hacia el futuro” y reafirmó el compromiso de su gobierno de “tomar las propuestas de las organizaciones como un mandato y un programa de acción para seguir construyendo una Latinoamérica unida y soberana”.
